En DÚO estamos convencidos que cualquier trabajo terapéutico de pareja pasa porque cada miembro haga también su propio trabajo terapéutico personal.
Tanto en un caso como en el otro, es esencial que adquirieran una habilidad básica, a la vez que compleja y bastante escasa en nuestra sociedad actual, que podemos denominar la “Atención Plena”.
La atención plena es la capacidad de estar en el aquí y ahora, observando sin juicio, presentes y conscientes de todo lo que ocurre en el exterior y en nuestro interior.
Como toda habilidad requiere mucha práctica, constancia, paciencia y motivación, porque si algo hacemos bien y tenemos muy entrenado es precisamente todo lo contrario, es decir, permanecer gran parte de nuestro tiempo en una especie de “piloto automático” o actividad mental incansable e incesante que nos proyecta continuamente al pasado o al futuro y, que nos desconecta del presente y de nosotros mismos.
Todo trabajo terapéutico en esencia requiere darnos cuenta de creencias y conductas disfuncionales presentes en nosotros mismos y sustituirlas por otras que no lo sean, es decir, que nos ayuden a afrontar adecuadamente y satisfactoriamente las distintas situaciones de la vida.
Para todo ello es imprescindible dominar la atención plena. Esta nos permite no entrar o salir del modo “piloto automático”, identificar cuando repetimos o hemos transformado con éxito una creencia o conducta disfuncional, cuando surge un hecho “detonador” que nos suele hacer reaccionar, como nos sentimos o que estamos pensando en todo momento, etc…
En Dúo ayudamos a las parejas a resolver sus problemas o a mejorar su relación practicando esta habilidad. Si te interesa y quieres empezar a practicar quédate con esta idea “Que tu mente y tus pensamientos estén donde esté tu cuerpo”l
