Qué difícil es que personas en conflicto quieran sentarse juntas para resolver sus propios asuntos, que una vez sentadas no se levanten anticipadamente porque el conflicto se ha recrudecido y que, si se mantienen reunidas, finalmente consigan un acuerdo satisfactorio para todas.
Así es de difícil la mediación y en DÚO somos conscientes de ello. Sin embargo, también somos consciente de lo necesaria que es.
Necesaria para empoderar a las personas y transformar nuestra manera de afrontar los conflictos interpersonales, más allá de planteamientos y conductas adversariales.
En DÚO nos hemos especializado en ofrecer la mediación a las relaciones de pareja, demostrando que es una herramienta eficaz de resolución alternativa de conflictos, en especial, cuando hay hijos en común y conflictos enconados y, a la hora de canalizar los divorcios de mutuo acuerdo.